Cada 13 de mayo, como Iglesia, festejamos a Nuestra Señora de Fátima. Apariciones cuyo mensaje, nos indicaba el papa Juan Pablo II, centran su núcleo, en la vocación a la conversión y a la penitencia, como en el Evangelio.
También de esta se desprende la devoción de los "5 Primeros Sábados de Mes", en honor del Inmaculado Corazón de María, que solemos practicar en nuestra parroquia.
1.- ¿Cómo practicar la devoción?
Los actos de piedad cada primer sábado de mes son: confesarse, comulgar, rezar el Rosario completo y hacerle compañía a María al menos quince minutos, meditando los misterios del Rosario.
2.- ¿Por qué en sábado?
Santo Tomás de Aquino decía que el sábado siguiente al Viernes Santo, la única que permaneció firme en su fe fue María, y por eso la Iglesia, para honrarla, le dedica ese día.
3.-¿Por qué cinco meses consecutivos?
Jesús se le apareció a Sor Lucía en la noche del 29 al 30 de mayo de 1930 y le explicó que “hay cinco tipos de ofensas y blasfemias pronunciadas contra el Inmaculado Corazón de María”.
a. Blasfemias contra su Inmaculada Concepción.
b. Blasfemias contra su perpetua virginidad.
c. Blasfemias contra su divina Maternidad.
d. Blasfemias de los que inculcan en los corazones de los niños indiferencia, rebeldía y odio por María.
e. Blasfemias de los que la deshonran directamente en sus sagradas imágenes.
4.- ¿Qué se obtiene con la práctica de esta devoción?
La Virgen María promete a su hijo “asistirle en la hora de su muerte con las gracias necesarias para que pueda salvarse”, es decir, tener la posibilidad de no morir en pecado mortal.
Hagamos propia esta devoción, y permitamos a María dar forma a nuestros corazones y prepararnos para toda una vida junto a Cristo.
«Nuestra Señora de Fátima, Ruega por nosotros»
Fuentes:
Aleteia
aciprensa