En este día en que la liturgia nos recuerda al diácono San Lorenzo, quién murió mártir durante la persecución de Valeriano. Es propicio recordar a los hombres que nos acompañan semana a semana ejerciendo este ministerio en nuestra parroquia: el diaconado permanente.
"Ser diácono, un llamado a Servir para que otros hermanos crezcan en la Caridad, en la Fe y La Esperanza" nos decía Raúl Cañas, diácono permanente de nuestra parroquia.
Alejandro Valenzuela, nos indicaba que además en este mes cumple 19 años desde su ordenación diaconal. "Ha sido una inmensa alegría poder compartir con mis hermanos, comunicándoles la alegría de servir al Señor con mucha humildad y entrega en este servicio al Señor como Diácono Permanente. Soy muy feliz de ser un portador de su mensaje de amor, paz y esperanza".
Sin duda, todos coinciden en un mismo sentimiento de gratitud para con Dios, por el ser llamados a esta vocación. Gylmar Conte resume esto muy bien: "Gracias Señor por todo lo aprendido en mi camino diaconal".
Vaya para ellos y sus esposas, pilares fundamentales en este caminar, nuestro afectuoso saludo en la fiesta de San Lorenzo, patrono de los diáconos.
